¡Que viva la presidenta!

Tras la entrevista que el alcahuete Hernán Brienza le hizo a Cristina La Muchacha Progre, la polémica no ha dejado de resonar en las redes sociales y en los diarios de todo el país. El entrevistador no siempre tuvo palabras elogiosas para la Presi, en octubre 2007, el periodista escribió una de las primeras biografías que se conocieron sobre CFK. ¿Cómo se hace para pasar de durísimo a lame bortas? Mirala acá.

La puesta en escena que algunos llaman "entrevista", fue transmitida en forma simultánea por la TV Pública y Radio Nacional. El sábado se emitió una primera parte de media hora y continuará el próximo sábado. Las críticas de la oposición no se hicieron esperar mientras los oficialistas ya preparan la DVD para grabar la segunda parte así tienen los dos capítulos de la farsa.

La semblanza de 21 páginas con material fotográfico, inédito por ese entonces, relata que Cristina Kirchner, durante sus años como legisladora nacional, se había ganado el mote de “Madame Guillotine”, por “su irascibilidad, autoritarismo y frontalidad”. Además revela un diálogo entre CFK y Néstor Kirchner, quien le había prometido, en plena dictadura militar, que irían al sur para “hacer guita”. Progresismo a full.

Hernán Brienza, el nuevo entrevistador preferido de la presidenta Cristina La Muchacha Progre Kirchner, no siempre tuvo generosas palabras hacía la primera mandataria, como sucedió en la entrevista del sábado. En la historia de vida que escribió Brienza hace años, cuenta desde cómo comenzó la relación de los padres de la Presidenta hasta cómo, “con una minúscula bikini”, enamoró a su novio rugbier de la adolescencia. Además, la biografía revelaba hechos inéditos sobre la juventud de la Presidenta como la vez que se agregó el apellido materno Wilhelm porque “Fernández era demasiado común”. “Antes de los 20, Cristina era apenas una muchacha coqueta con aspiraciones a ‘concheta’ de La Plata, cuyas amigas de la secundaria le reprochaban con total soltura: ‘¿Qué te hacés, nena? Si vos sos Fernández…’, escribió Brienza.