El Frente para la Victoria y sus candidatos deberían pagar el helicóptero que destruyó en campaña

Por E. Simón 
Anunciaron que se compró un helicóptero Bell 429 a un valor de 7 millones de dólares. El Estado de San Juan lo adquirió a una fábrica de Canadá y fue pagado por todos los sanjuaninos. Pregunto, ¿no debería pagarlo el Frente para la Victoria ya que la aeronave que estrellaron era usada para la campaña de un partido y no para beneficio de los ciudadanos?

El periodismo no debería manejarse con dogmas. El modo anodino y estéril de escribir que tienen algunos diarios locales no sirve para hablarle al poder de igual a igual, como debería ser en una democracia real y no procedimental como la que tenemos. Entonces vamos a hablarle al gobernador de San Juan en segunda persona del singular, es decir, face to face, y eso que no soy ni Mark Zuckerberg ni Eduardo Saverin ni Chris Hughes ni Dustin Moskovitz.

Vamos entonces: Gobernador Gioja, no cometa una injusticia contra sus coterráneos, que el Partido Justicialista pague la nave. Ustedes destruyeron el helicóptero del Estado de San Juan haciendo campaña para el Frente para la Victoria junto a los candidatos Daniel Tomas y Margarita Ferrá de Bartol. Costó meses de internación, operaciones, la muerte de una candidata y una serie de infortunios que ya pagamos en efectivo todos. ¿Tenemos que seguir pagando? ¿Cuántas escuelas de campo podríamos hacer con los 7 millones de dólares que es lo que costó el nuevo helicóptero?

Recuerde, gobernador, un solo accidentado grave le cuesta al Estado 55.700 pesos, el equivalente a 8 sueldos básicos. Imagínese lo que nos costó el accidente de los muchachos en su bendita campaña. Tenga un gesto de decencia, sé que a veces es difícil, cuando se es un ruin, adoptar la forma de la decencia. No quiero decir con esto que usted sea corrupto o ruin, lo dijo diario Clarín hace años, cuando sucedió lo de las "coimas en el Senado", y lo dijo Pontacuarto en el libro de Miguel Bonasso, El Mal (páginas 209 y 210).

Gober, yo sólo quiero que usted muestre ser un ciudadano probo, con honestidad suficiente como para hacer una autocrítica. Confesar que usaban el helicóptero en campaña, que lo chocaron y lo estropearon y que están dispuestos a pagar de sus patrimonios particulares el daño causado al Estado. Acuérdese que a su compañero en su paso por el menemismo, don Jorge Escobar, lo destituyeron por mucho menos. Fue por usar máquinas del Estado para trabajos en su finca, ¿se acuerda? No se deje destituir, gobernador, mire que puede surgir algún fiscal con dignidad (los que tenemos por ahora mostraron no tenerla), y movilizar una causa contra su accionar respecto al bendito helicóptero. Piénselo, se lo dice un amigo.