La fuga por goteo que sufrió el bloque oficialista tras la derrota en las primarias, dejó al kirchnerismo sin el número necesario para tratar temas sin consensuar.
La derrota electoral del kirchnerismo comenzó a tener consecuencias concretas en la Cámara de Diputados, tres meses antes del recambio legislativo. Por alejamientos producidos en las últimas semanas, el bloque que conduce Juliana Di Tullio perdió el quórum propio. Para asegurarse la aprobación de leyes clave en materia económica, de aquí al 10 de diciembre, dependerá del respaldo de aliados circunstanciales.
El último en pegar el portazo fue el fueguino Rubén Sciutto. Abandonó la bancada kirchnerista esta semana con críticas a la Casa Rosada y anunció su pase al espacio que responde al intendente de Tigre, Sergio Mantequita Massa. "A partir de ahora voy a votar sólo las leyes que le hagan bien a Tierra del Fuego y al país", dijo.